Las cosas en su sitio

A es una mujer de unos 38 años, B un hombre de la misma edad. A y B están en una cocina recién reformada, B está atado en una de las sillas de la cocina amordazado con un trapo de estampado de pequeños tomates cherry. A cocina un arroz al horno mientras se dirige a B

A

El truco consiste en cortar las rodajas de patata como si fueran papel de fumar, finas finas… así no se quedan duras. No te muevas que te vas a hacer daño, esas sillas son horribles… muy modernas si, pero horribles e incomodísimas, te vas a romper la espalda como sigas así… ¿dónde está el rayador? ¿por qué no está en su sitio? Sabes que con tus problemas deberías tener las cosas guardadas en sus respectivos sitios y el puto rayador siempre ha estado en el segundo cajón, ¿dónde te ha escondido el rayador esa puta payo-poni? (B lo señala con la mirada) ¿Detrás de la puerta? La muy zorra… ¿Qué clase de psicópata colgaría el rayador de queso detrás de la puerta en un gancho con forma de flor? ¿Para qué? ¿Para que se llene de polvo? ¿Ahora te gustan los espaguetti con queso y polvo? Dime la verdad, dime que no soportas estos azulejos, esto parece un restaurante de comida colombiana para llevar joder… cuánto colorín y cuánta tontería… tijeras naranjas, tazas con lunares, cubiteras con forma de muñeco de nieve… el escurridor verde… hay que tener una vida muy triste para necesitar todas estas gilipolleces… y la puerta…? si, ya se que la puerta me la cargué yo…  pero es no cerraba bien y no fue buena idea ponerla con cristal, se llenaba de grasa… pero esta puerta… no tiene ningún sentido…! se abre hacia los dos lados…! ¿estamos locos o qué? Así es imposible saber si se entra o si se sale… ¡quieres estarte quieto! deja de preocuparte, ella está bien, está descansando en vuestra bañera de ikea… descansando en el cielo de los sudacas… (Ríe) Comen mondongos y bailan cumbias a todas horas hasta arriba de farlopa! No estés triste… Ahora me encargaré de lo que queda de ella, solo dime que prefieres mi arrocito al horno a sus putas arepas, masa de maíz… que asco.. qué indigesto… con razón estás más gordo, te está saliendo papada y tienes menos pelo… eso es sin duda, síntoma de una alimentación desequilibrada… mírame a mi, estoy mejor que nunca, tócame el culo… tócamelo! (A se coloca detrás de la silla para que B pueda alcanzar a tocarla con las manos atadas) Duro como un iceberg… pura fibra, glúteos occidentales…  lo echabas de menos ¿verdad? (B llora desesperado) No te preocupes mi amor, he vuelto para siempre, he vuelto  para cuidarte porque se que nunca me has olvidado y porque ahora me necesitas más que nunca, es muy duro sobrellevar la muerte de un ser querido y yo, que sabes perfectamente que lo he superado varias veces, ahora puedo ayudarte…. Se empieza  por comer bien, mira… El arroz al horno está en su punto… También he traído un Protos como a ti te gusta… ¿quieres que lo recoja todo y lo celebramos? (B asiente con la cabeza, A lo desata y lo besa metiéndole la lengua hasta casi ahogarlo) Así me gusta mi amor, que entres en razón… ale! (desatándolo) ve a poner la mesa con el mantel que nos regaló mi madre… y las cosas en su sitio!